Cantabria está llena de lugares que no siempre salen en la portada de las guías, pero que sorprenden y enamoran a quienes los descubren.
En la zona occidental, la Playa de Berellín te espera con su arena dorada y aguas turquesa, un paraíso escondido entre acantilados. Adéntrate bajo tierra en la visita minera de la Cueva El Soplao: galerías espectaculares y el eco de un pasado minero sorprendente.
En medio del bosque, la Ermita de San Román de Moroso aparece como un vestigio mozárabe, solitaria y llena de misticismo. La Ruta de los Menhires de Valdeolea es un viaje entre praderas y misterios prehistóricos, perfecta para los que buscan historia y naturaleza.
En los Valles Pasiegos, el Alto del Caracol regala vistas infinitas y la sensación de libertad que solo dan las montañas de Cantabria. Y en el oriente, los Fuertes Napoleónicos de Santoña miran al mar y evocan batallas, con panorámicas que quitan el aliento.
Descubre otra Cantabria, menos conocida pero igual de infinita.